¿Será posible que el internet llegue a toda la casa?



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Por: Mauricio Romero


Usted no es el único que sufre al conectarse a la red desde rincones del hogar que están lejos del router. Guía básica para entender el problema y sus posibles soluciones.

El trabajo desde casa, el estudio remoto y el entretenimiento en el hogar han convertido al acceso a Internet en un servicio público casi tan importante como el del agua o la energía. No obstante, una de las quejas más usuales que los usuarios les remiten a los proveedores del servicio es que, en algunos puntos de la vivienda, la velocidad de conexión no es la esperada, la transmisión de datos es intermitente o, sencillamente, no existe.

Con bastante frecuencia, los operadores no garantizan dicha velocidad mediante la tecnología wifi, pues esta tiene muchas variables dentro de una vivienda: “No le podemos asegurar la misma velocidad que el acceso cableado”, suelen decir. En otras palabras: por cable, entregan el desempeño promocionado, pero, de manera inalámbrica, no se comprometen. Dicha situación tiene mucho que ver con la distancia a la que se encuentra el enrutador (router) de los computadores, el smart TV o los dispositivos móviles que usan la red.

Y en este caso nos referimos solo a la señal inalámbrica, pues se da por descontado que el acceso cableado no presenta ninguno de los problemas mencionados anteriormente, a menos que se trate de una falla del origen de la señal, en cuyo caso el operador es responsable de revisarla y solucionarla.

La mala recepción de los datos también tiene relación con la cantidad de obstáculos que haya en el camino entre el enrutador y el aparato receptor. Y esos obstáculos suelen ser las paredes de cemento o de ladrillo, las placas de concreto que dividen los pisos de una casa o los recovecos que la señal inalámbrica debe superar para viajar desde el enrutador hasta el dispositivo.

Si su conexión en casa presenta dichos inconvenientes en términos de distancia u obstáculos, existen algunos trucos que se pueden aplicar para mejorar la calidad de la señal o, por lo menos, para que esta alcance los lugares más apartados de la casa.

1. Ubicación del enrutador

Ocurre con cierta frecuencia que los técnicos enviados por el operador del servicio de internet instalan el enrutador cerca del computador principal (cableado).

Sin embargo, no siempre es el punto más idóneo o el más central del hogar para que la señal se reparta equitativamente a todos los rincones por igual.

Por ello, trate de ubicarlo en un sitio equidistante a las habitaciones y los diferentes puntos de acceso a la señal dentro de la vivienda.

También es recomendable ubicar el enrutador sobre una mesita, que no quede en el piso ni pegado al techo, de tal forma que se ubique a la misma altura de los computadores o del televisor. Y jamás lo encierre en un armario, pues eso le quita potencia a la señal.

Tampoco es recomendable ubicar el enrutador cerca de hornos microondas o neveras, pues las emisiones de estos aparatos y su material metálico representan obstáculos para la señal. El agua también merma la potencia de la conexión; por ello, el enrutador no se debe localizar cerca de acuarios o peceras.

Recuerde que, a mayor distancia, menor potencia de la señal. Eso significa que si su casa es muy grande, debe optar por otras soluciones, como un repetidor.

2. Orientación de las antenas

Hay que tener en cuenta que las antenas del enrutador (por lo general, estos aparatos tienen entre una y seis) emiten la señal en todas las direcciones, pero es más fuerte la que sale del tallo de dicha antena hacia los lados, más que de la punta.

Si desde el enrutador quiere distribuir la señal en el mismo piso, es mejor dejar las antenas en posición vertical. Sin embargo, si desea alimentar la señal a un piso superior o inferior, lo mejor es dejarlas casi en posición horizontal, con un ángulo de 30 grados. Y si quiere llegarles a aparatos en ambos pisos, lo mejor es dejar la mitad de las antenas a 30 grados y las demás completamente verticales.

Las anteriores acciones siguen cierta lógica, pero hay veces en las que el usuario debe jugar con la orientación de las antenas para lograr un mejor resultado.

3. Cambiar de canal según la necesidad

La mayoría de los enrutadores actuales permiten conectarse a la red de dos formas: por la red de 2,4 GHz o la de 5 GHz. Podría pensarse que la de 5 GHz es la más idónea en todas las ocasiones, pero no es así. Dicha red sí es más veloz que la de 2,4 GHz, pero tiene una longitud de onda más corta, así que la señal pierde bastante potencia con la distancia y es más sensible a los obstáculos.

La de 2,4 GHz, por su parte, es más lenta, pero alcanza a llegar a los sitios más apartados de la vivienda. Además de la potencia y la distancia, otro aspecto que se debe tener en cuenta a la hora de usar una u otra banda es saber qué tan saturadas están. Por ejemplo, la frecuencia de 2,4 GHz también la usan los hornos microondas, los aparatos con bluetooth y algunos dispositivos para monitorear a los bebés.

Hay enrutadores que permiten escoger la frecuencia, mientras que otros lo hacen de forma automática. También hay aparatos que permiten medir la potencia de la señal.

4. Repetidores o amplificadores de señal

En las viviendas grandes o de varias plantas, es necesario comprar (o pedirle al proveedor de Internet) un repetidor de señal.

Este dispositivo es, básicamente, otro enrutador que se ubica a una distancia intermedia entre el principal y el aparato receptor. El repetidor recibe la señal y la vuelve a emitir como si fuera la original, con el fin de que la conexión se mantenga estable y llegue más lejos dentro de la casa.

5. Adaptadores PLC

Otra forma de potenciar la señal es mediante un juego de aparatos conocidos como PLC. Estos se enchufan a los tomacorrientes donde se conectan el computador y el enrutador, respectivamente, y llevan la señal de Internet por el cableado eléctrico. Esta opción ayuda, pero no ofrece el 100 % de la velocidad contratada en su hogar. Los PLC se pueden instalar en cualquier momento y lugar, pues son como unos adaptadores para la pared que solo basta enchufar.






¿QUÉ ES EL WIFI 6?

Se trata del más reciente estándar de transmisión inalámbrica para redes. Es simplemente la sexta versión de la nomenclatura conocida como 802.11. El wifi 6 (que es la nomenclatura 802.11ax) ofrece más velocidad y soporte a un mayor número de dispositivos conectados a la vez a una misma red.


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